Skip to main content

Perder un diente no es una situación fácil. Nos preocupamos por la estética de nuestra sonrisa, por si la funcionalidad de nuestra boca va a ser la misma en algún momento o si nos va a acarrear problemas de salud bucodental. Cuando esto ocurre, los pacientes vienen a consulta y nos preguntan por las diferentes opciones que les podemos brindar para solucionar su problema. Muchos de ellos nos preguntan en clínica las diferencias entre un implante y un puente dentals.

Como hemos visto que puede traer confusión, hemos preparado este post para aclarar todas tus dudas. Si quieres saber en qué casos se coloca un implante y en cuáles un puente, quédate leyendo este post.

¿Qué es un implante dental?

Los implantes son tornillos de titanio que se colocan en el hueso del diente perdido para sustituir la raíz del diente.

Es una de las soluciones que le damos a nuestros pacientes cuando estos pierden un diente.

Una vez colocado el implante, se coloca una corona hecha a medida sobre el mismo, que simula un diente natural tanto en estética como en funcionalidad.

Existen dos modalidades de colocación del implante: la convencional y la avanzada de carga inmediata. Te las explicamos a continuación:

¿Cómo colocamos un implante y la corona?

Si te van a poner un implante, este es el procedimiento que se va a seguir en clínica:

Antes que nada, se deberán tomar unas radiografías de tu boca para evaluar el estado de tu hueso, que es donde irá colocado el implante dental.

Si tu hueso está en buenas condiciones, se procede a colocar el implante dental, para lo que se precisa de una pequeña intervención quirúrgica. De esta forma, se te pondrá anestesia local para que no sientas nada durante todo el procedimiento.

Una vez colocado el implante sobre el hueso, habrá que esperar un tiempo (entre 3 y 6 meses) hasta que el implante se haya osteointegrado y la herida haya cicatrizado correctamente. En este momento, ya se podrá colocar la corona artificial sobre el implante, que es lo que le devolverá la naturalidad a tu sonrisa ofreciéndole estética y funcionalidad.

Implantología avanzada de carga inmediata

Los avances tecnológicos nos permiten ofrecerles a nuestros pacientes siempre mejoras en la calidad de sus sonrisas. Y no iba a ser menos en el campo de la implantología.

Ahora, con la implantología de carga inmediata, no es necesario esperar el tiempo de la osteointegración para poder colocar una corona. En el mismo día, puedes salir de la clínica con el implante dental y una corona fija temporal.

¿Los beneficios? Recuperas en un mismo día la estética y la funcionalidad de tu boca, pudiendo sonreír y masticar con normalidad.

Una vez haya pasado el tiempo de osteointegración y cicatrización, la corona temporal se cambia por una corona fija definitiva que, a partir de ese momento, formará parte de tu sonrisa.

¿Qué es un puente dental?

A diferencia del implante, un puente es una estructura compuesta por varias coronas que simulan la forma de diferentes dientes.

Esta prótesis está destinada a cerrar espacios en la dentadura tras la pérdida de uno o varios dientes. De este modo, la función principal de un puente dental es restituir la dinámica del aparato bucodental, tanto la masticación y fonación como la estética.

La forma de colocación de un puente dental es fijándolo sobre las piezas naturales del paciente, por eso, es necesario tallar los dientes adyacentes para que la corona se pueda colocar sobre ellos. Por lo tanto, con el tallado, se reduce el tamaño de los dientes pilares.

Tras el tallado, se colocan unas prótesis provisionales para no perder ni la estética ni la funcionalidad mientras en el laboratorio se esté confeccionando el puente dental fijo definitivo.

¿Por qué es importante reponer un diente cuando lo perdemos?

Todos nuestros dientes tienen una función determinada en nuestra boca y, cuando perdemos uno de ellos, la función de esa pieza dental en concreto deja de realizarse.

Con ello, existe una sobrecarga del resto de dientes que, además de ejercer su propia función, tienen que hacer un doble esfuerzo para realizar la función del diente perdido. Esto fomenta lo siguiente:

  • Dificultades para masticar que, puede acabar en problemas de deglución y problemas digestivos.
  • Movilidad de las piezas adyacentes para cubrir el hueco dejado por el diente perdido, lo cual genera problemas de oclusión.
  • Se producen cambios y dificultades en la fonación.
  • Pérdida ósea de la pieza dental perdida. Cuanto más tiempo pase desde que pierdes un diente hasta que lo sustituyes, más hueso se perderá y más complicado será colocar un implante.
  • Higiene bucodental deficiente, por la mayor posibilidad de acumulación de restos de comida y placa bacteriana en el hueco del diente perdido. Esto aumenta los riesgos de sufrir una enfermedad periodontal.

¡Ya lo sabes! Reponer un diente cuando lo perdemos es muy importante para nuestra salud bucodental y nuestra salud general.

Déjate recomendar por nuestros profesionales sobre la mejor opción para tu caso en concreto.

¿Tienes más dudas? ¡Consúltanos!

Paterna ➡️

☎️ 625 38 38 97

📍 C/ Maestra Mariana Colás, 28, 46980.


Manises ➡️

☎️ 601 48 17 24

📍 C/ Carretera Ribarroja, 11, bajo, 46940.

Abrir chat
💬 ¿Tienes una consulta?
Hola 👋
¿En qué podemos ayudarte?