Que son las Carillas Dentales
Definición de carilla dental
Las carillas dentales son un tratamiento dental de carácter estético.
La carilla es una lámina delgada que se coloca en la parte frontal o exterior de los dientes, para que imite al diente natural sobre el cual se está colocando. Esto se logra mediante un proceso de adhesión, donde se utiliza un cemento especial para fijar la carilla al diente, garantizando su estabilidad y durabilidad a largo plazo.
Las citadas láminas, se fabrican a medida para cada paciente, asegurando un ajuste perfecto y una apariencia natural. Se toma en cuenta el color, la forma y el tamaño del diente para una integración armoniosa con la sonrisa del paciente
Existen principalmente dos tipos: las carillas de porcelana, conocidas por su durabilidad y resistencia a las manchas, y las carillas de composite, más económicas y con una instalación más rápida. Ambas opciones ofrecen una mejora estética significativa, pero varían en coste, procedimiento de instalación y mantenimiento a largo plazo
Función estética de las Carillas Dentales
El propósito de una carilla dental es mejorar el aspecto de nuestra sonrisa, camuflando las imperfecciones de los dientes naturales, como manchas, coloración amarilla, asimetría entre los dientes, etc. La carilla le ahorra al paciente gran cantidad de procedimientos dentales estéticos que mejoren las imperfecciones del diente natural, y le ofrece una solución rápida e inmediata para lucir una dentadura atractiva. Por ejemplo, son ideales para corregir dientes ligeramente torcidos, cerrar pequeños espacios entre dientes o cambiar la forma de dientes que parecen demasiado pequeños o desproporcionados en comparación con el resto.
Función práctica de las Carillas Dentales
Además de su función estética, las carillas también pueden mejorar la operatividad de los dientes, proporcionando una superficie más uniforme y resistente para la masticación. Sin embargo, es importante mencionar que en algunos casos las carillas pueden aumentar la sensibilidad dental, especialmente inmediatamente después de su colocación, aunque esto suele ser temporal.
En casos de desgaste leve del esmalte o pequeñas fracturas, las carillas pueden también ofrecer una capa de protección adicional, ayudando a prevenir futuros daños en los dientes afectados.
Historia de las Carillas Dentales
Aunque las carillas dentales ganaron popularidad en los años 70, su origen se remonta a los años 30, cuando se utilizaron por primera vez en Hollywood para mejorar la sonrisa de los actores. Fue en esta época que ocurrió el salto del cine mudo al sonoro, volviendo relevante para la estética de las películas, el que los actores tuvieran dentaduras atractivas para el público.
Al inicio se exploraba el uso de materiales de baja durabilidad a través de la prueba y el error. Las primeras carillas se retiraban luego de días u horas, y no podían llevarse durante más tiempo, sino en ocasiones específicas.
El doctor Charles Pincus dio con la cerámica como el material más conveniente para lograr remodelaciones dentales con carillas de alta durabilidad. Con el tiempo y los avances tecnológicos, se han perfeccionado los métodos de fabricación y adhesión de las carillas, logrando resultados todavía más duraderos y estéticos.
Las carillas que conocemos hoy en día aparecieron por primera vez a inicios del siglo 20. Con el paso de los años, la evolución de los materiales y las técnicas de adhesión han permitido que las carillas se conviertan en una solución duradera y fiable.
Beneficios de las carillas dentales
Beneficios Estéticos de las carillas dentales
Resistencia a las manchas de las carillas
Los materiales que se utilizan para fabricar carillas son diferentes, quimicamente, del tejido que compone nuestros dientes naturales. Nuestros dientes tienen una gran tendencia a adquirir manchas irreversibles en ellos, ocasionadas por los alimentos que ingerimos.
En cambio, el material de las carillas dentales está diseñado para resistir manchas, lesiones y despigmentaciones, volviéndolas altamente duraderas en el tiempo e inmunes al paso de alimentos y bebidas.
La porcelana, en particular, es conocida por su alta resistencia a las manchas en comparación con otros materiales, como la resina compuesta.
Aspecto natural de las Carillas
Las carillas son una solución artificial a nuestros dientes reales, por lo que algunas personas pueden inquietarse al pensar en cuanto se notará que llevan un tratamiento artificial. Afortunadamente, una de las características más importantes de las carillas es que imitan al diente natural, siendo así casi indistinguibles entre sí.
Color personalizado de las carillas
Durante el tratamiento, el paciente tiene la libertad de elegir entre una serie de tonos disponibles para sus carillas, que van desde un color beige hasta blanco impoluto. La apariencia natural de las carillas dependerá enormemente del tono que sea elegido por el paciente, siendo los colores blancos los que producen un efecto más artificial.
Beneficios Funcionales de las Carillas
La Carilla dental protege el diente
Las carillas protegen la superficie frontal del diente natural, evitando que este reciba lesiones. Este revestimiento actúa como una barrera contra la erosión ácida y el desgaste físico, preservando la integridad del diente subyacente. Es especialmente beneficiosa para personas con dientes que han sufrido erosión ácida leve o desgaste debido al bruxismo, ya que las carillas pueden ayudar a prevenir daños adicionales.
Las carillas son menos imvasivas que otros tratamientos
Las carillas dentales afectan menos el esmalte dental que otros tratamientos, evitando problemas de sensibilidad en el paciente.
Mejora de la función masticatoria
A algunos pacientes suele costarles más de lo normal el masticar, debido a que poseen una superficie irregular en el diente o una desalineación de los dientes. Al colocarse las carillas, estos dos factores dejan de molestar al paciente, ya que la carilla cubre la superficie irregular y una vez colocadas se alinean perfectamente entre ellas. Esto solo es posible con desalineaciones leves.
Es importante destacar que las carillas no son una solución para desalineaciones severas o problemas de mordida, que pueden requerir tratamientos ortodónticos más complejos.
Características de las Carillas Dentales
Materiales Utilizados
Carillas de Porcelana
Es el material más utilizado para la elaboración de carillas dentales. La porcelana es un tipo de cerámica altamente resistente a cualquier tipo de daño. Son especialmente resistentes ante manchas o decoloraciones. Las carillas de este material suelen medir 0,5 milímetros de grosor y requieren preparar previamente el diente por medio de un desgaste.
Carillas de Resina Compuesta
La resina compuesta o resina sintética es un material muy utilizado en el campo de la estética dental, debido a su precio accesible. En carillas dentales, la resina compuesta (también llamada composite) es dura, resistente y de buena apariencia, por lo que es una de las opciones más seleccionadas, ya que a pesar de ser muy económicas, ofrecen características muy buenas. Una de sus mejores características es que para colocarse requiere menos desgaste del esmalte que la cerámica. La porcelana, siendo un material más duro y translúcido, ofrece un acabado más realista y duradero que la resina compuesta. Sin embargo, la resina es más fácil de reparar y ajustar en el consultorio dental.
Las carillas de resina compuesta no suelen ser las definitivas, y se utilizan en casos especificos, como en niños y adolescentes, hasta poderlas cambiar por unas de cerámica.
Al fabricar carillas de alto presupuesto, siempre se recomienda al paciente seleccionar cerámica, puesto que posee mejor apariencia, mayor luminosidad y resistencia ante la tinción.
Durabilidad de las Carillas Dentales
Depende del material y el mantenimiento que se le dé a las carillas. Bajo un riguroso mantenimiento, las carillas de porcelana pueden durar de 10 a 13 años y las de composite pueden durar de 4 a 8 años.
Es crucial destacar que la durabilidad también depende de los hábitos personales, como evitar morder objetos duros y mantener una buena higiene bucal, lo que puede prolongar significativamente la vida útil de las carillas.
Mantenimiento de las Carillas
Mantener higiene oral
Cepillarse los dientes una cantidad mínima de dos veces al día, una hora después de haber comido. Utilizar hilo dental para retirar los restos atrapados en los espacios interdentales y limpiar minucionsamente, para evitar la aparición de caries que causen complicaciones en nuestras carillas, obligándonos a retirarlas.
Es crucial mantener una buena higiene para prevenir la formación de caries debajo de las carillas, lo que podría comprometer su durabilidad y la salud dental general.
Además, se recomienda evitar el uso de pastas dentales abrasivas y cepillos de dientes duros, que pueden desgastar el brillo y la superficie de las carillas con el tiempo.
Evitar hábitos nocivos
Los hábitos como el bruxismo, el morderse las uñas, morder lápices y utilizar el borde de los dientes para destapar cosas, son todos potencialmente riesgosos de dañar nuestras carillas. En particular, para pacientes con bruxismo, se recomienda el uso de protectores nocturnos para evitar el desgaste excesivo de las carillas.
Visitar al dentista
Las carillas son un tratamiento de remodelación estética dental, que debe ser monitoreado como cualquier otro tratamiento, solo que de manera más pasiva. Es importante asistir a las consultas con nuestro dentista, para que examine el estado de nuestras carillas y nos asegure que todo está en orden.
Protegerse contra lesiones
Utilizar protectores bucales al realizar deportes es fundamental para cuidar nuestras carillas, especialmente en las de resina compuesta o composite, ya que no son tan resistentes como las de cerámica.
Tipos de Carillas Dentales
Carillas tradicionales
Son las carillas comunes, hechas con cerámica o resina, que requieren un desgaste previo del esmalte y son permanentes (sólo las retira el dentista). Las carillas tradicionales suelen durar de 5 a 15 años, dependiendo de la limpieza, el cuidado y el material.
Carillas Removibles (Snap-On)
Son carillas “Ocasionales”, lo que quiere decir que se aplican para eventos importantes, y se retiran luego de algunas horas o días. Este tipo de carillas pueden ser colocadas y retiradas por el mismo paciente, similar a otros aparatos dentales como protectores o dentaduras, sin embargo, el uso de carillas removibles debe ser supervisado bajo la instrucción de un dentista, para no dañar el esmalte de nuestros dientes.
Carillas Lumineers
Su principal característica distintiva de las carillas tradicionales, es su grosor. Mientras que una carilla normal mide aproximadamente 5 milimetros de espesor, las luminers miden 0.5 milimetros. Su objetivo es proporcionar una remodelación estetica que no implique un desgaste sustancial del esmalte del diente, como en las carillas tradicionales. De esta forma, si el paciente desea retirarlas en algún punto, no tendrá que enfrentarse a efectos adversos ocasionados por el desgaste dental.
Además, las Lumineers suelen ser una opción más conservadora, ya que requieren mínima o ninguna modificación del diente natural, lo que las hace reversibles en comparación con las carillas tradicionales.
Comparativa: ¿Qué carilla necesitas?
Elegir Carilla según durabilidad
Las carillas de cerámica son las más duraderas de todas, y las snap on las menos duraderas.
Elegir Carilla según apariencia
Las carillas de cerámica tradicionales y las lumineers son resistentes ante manchas y golpes, las de resina compuesta pueden mancharse y ser más debiles.
Elegir Carilla en base a si invasividad
Las carillas lumineers son las menos invasivas debido a su diminuto grosor y las snap on debido a su carácter removible. Las carillas tradicionales son las que requieren un mayor desgaste del diente, en especial las de cerámica.
Elegir Carilla en relación a la inversión
Las lumineers son las más costosas actualmente, ya que su delgadez solo puede ser lograda por maquinas de avanzada tecnológica y gran precisión.
Procedimiento de Colocación de Carillas
Consulta Inicial
Primero se evalúa el estado del paciente, cuál es su problemática y si es apto para recibir un tratamiento de carillas dentales. Los pacientes con caries deben tratarlas antes de colocarse carillas, ya que estas pueden empeorar si se les colocan carillas encima.
Los pacientes con problemas severos de mala alineación y maloclusión de los dientes, deben tratarse antes de recibir carillas, porque estas podrían empeorar el problema o en su defecto, generar una apariencia antinatural.
Planificación
Luego de determinarse si el paciente es apto para el tratamiento, se le presentan los tipos de materiales y colores disponibles. El paciente recibe una breve explicación de los pro y los contra de cada material y se le responden sus dudas al respecto. También recibe asesoría acerca de las impresión social que causa cada color disponible para sus carillas, y dependiendo de su opinión y objetivos personales, se le guia hacia la mejor decisión.
Preparación Dental para las Carillas
Una vez que se ha decidido el tipo de carilla, el material y el color, se procede a preparar el esmalte dental realizando el desgaste necesario. Si el paciente seleccionó carillas tradicionales, el desgaste será más profundo, en cambio, si seleccionó las carillas lumineers, el desgaste será superficial.
Es posible colocarle al paciente carillas provisionales, llamadas mock up, mientras se fabrican las carillas permanentes. Esto le permite al paciente visualizar previamente como quedará su resultado final.
Toma de Impresiones
Para hacer las carillas en el laboratorio, se hacen moldes de los dientes del paciente, con alginato, silicona u otros materiales. Estos moldes los usarán en el laboratorio para fabricar las carillas a la medida.
En algunos consultorios ya no se utilizan pastas, sino un escáner intraoral que produce una imagen digitalizada de la dentadura del paciente.
Fabricación y Ajuste de la Carilla Dental
Luego de ser fabricadas, las carillas se le entregan al dentista para que las revise y se las muestre y pruebe al paciente. De ser necesario, se resaltan aspectos que deben ajustarse y son enviadas de vuelta al laboratorio para limar imperfecciones finales.
Proceso de Cementado
Cuando las carillas están listas, se cementan en los dientes del paciente. Para hacer esto, primero se hace una limpieza bucal y se aplican productos que mejoran la adhesión de las carillas al esmalte. Posteriormente, se le aplica cemento a las carillas y cuidadosamente se unen a los dientes. En caso de carillas de resina o composite, para acelerar el proceso de solidificación, se reflejan los dientes con una luz polimerizada.
Finalización
El paciente debe probar la dureza y la resistencia de las carillas por medio de pruebas de oclusión, también le va indicando al dentista las sensaciones que experimenta y este se asegure que todo está en orden. Al finalizar el proceso, el paciente recibe instrucciones específicas para el cuidado de las carillas y se le asigna una cita de revisión.
Candidatos Ideales para Carillas Dentales
¿Son mis condiciones Dentales adecuadas para ponerme Carillas?
Las carillas pueden colocarse, sin problemas, en personas con un esmalte dental saludable, que no ha sido desgastado por tratamientos dentales o por enfermedades. Se pueden colocar en dientes con desalineaciones y espaciamientos ligeros, en dientes con manchas y decoloración y con formas irregulares, como astillas o cortes. La carilla es capaz de cubrir todas estas imperfecciones, siempre y cuando no sean severas.
Además de consideraciones estéticas, los dentistas evalúan la función dental general del paciente para asegurarse de que las carillas no solo mejoren la apariencia sino también contribuyan a la salud bucal general.
¿Es mi Salud Bucodental adecuada para ponerme Carillas Dentales?
El paciente no puede tener ninguna enfermedad bucodental. Las caries se consideran una infección de los dientes, por lo que están incluidas. Especialmente, el paciente no puede tener gingivitis o periodontitis.
Asimismo, pacientes con hipersensibilidad dental primero deberán pasar por una evaluación previa, que determine si pueden o no recibir el desgaste del esmalte dental sin empeorar su hipersensibilidad en el proceso.
Expectativas y Resultados Realistas
El paciente debe entender la forma en que trabajan las carillas y las limitaciones que tienen las mismas, teniendo en cuenta el color y el material que ha sido seleccionado. Las carillas conllevan un proceso irreversible.Es esencial que los candidatos tengan expectativas realistas y una comprensión clara de los resultados estéticos y funcionales. Además, la evaluación psicológica del paciente para garantizar su bienestar emocional es un aspecto crítico en la decisión de proceder con carillas.
Finalmente, las carillas no son un tratamiento milagroso, y duran dependiendo del cuidado que se les dé. Un paciente con una higiene dental deficiente tendrá que reponer sus carillas antes que uno que cuida sus hábitos, limpia su boca rigurosamente y es cuidadoso con evitar las lesiones.
Cuidado y Mantenimiento de las Carillas
Higiene Dental Post-Colocación
La higiene debe ser constante, siempre con el objetivo de evitar, lo máximo posible, la acumulación de placa bacteriana en las carillas. Si se forman caries deberán retirarse las carillas tarde o temprano.
La higiene dental incluye limpiar los dientes hasta tres veces por día una hora después de comer. Utilizar hilo dental y enjuagues sin alcohol.
Sensibilidad y Comodidad Post-Colocación
El desgaste realizado en el esmalte puede provocar sensibilidad dental en el paciente por algunos días. Esto implica experimentar incomodidades con las temperaturas altas o bajas y sentir dolor al rechinar los dientes o morder alimentos muy duros. La sensibilidad desaparece con el tiempo, y si no lo hace, debe contactar a su dentista.
Alimentos y Hábitos a Evitar
Evitar el consumo de tabaco y alcohol
Estas dos sustancias pueden manchar las carillas y afectar su salud bucodental.
Evitar alimentos que manchen
Solo las carillas hechas de cerámica son resistentes a las manchas. Si lleva las de resina, debe evitar los alimentos que produzcan manchas, ya que progresivamente estos irán tiñendo sus carillas.
Evitar alimentos pegajosos y duros
Deben evitarse, especialmente durante las primeras semanas después de la operación. Posterior a esto, se tiene más libertad de consumir alimentos de diferentes texturas, pero siempre teniendo en cuenta que, si este es demasiado compacto, podría dañar las carillas, especialmente las de resina.
Controles y Revisiones Regulares
El dentista debe realizar un chequeo periódico del estado de sus carillas, para llevar un control de las mismas y de su deterioro, ya que estas se van desgastando a través del uso. El dentista también examina el estado de sus dientes naturales, asegurándose de que no haya caries ni indicios de enfermedad.
Las carillas dentales son una opción popular para mejorar la estética dental en casos donde los dientes presentan manchas, desgaste, roturas o desalineaciones leves. Este tratamiento no solo mejora la apariencia sino también puede contribuir a la salud dental.