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Coronas de Zirconio
En el mundo de la odontología restaurativa, las coronas de zirconio se destacan como una innovación moderna, ofreciendo una solución estética y duradera para dientes deteriorados. Este artículo se centra en explorar las características únicas y los beneficios de las coronas de zirconio, una alternativa avanzada a las opciones tradicionales de restauración dental.
En los últimos años, se descubrió la gran versatilidad del zirconio en procedimientos dentales, siendo este un tipo de elemento similar al titanio, pero con una apariencia translúcida y blanquecina, que actualmente fascina a la mayoría de clientes que desean aplicarse coronas. El Zirconio figura como una de las mejores opciones actualmente, ya que posee la textura fresca y tersa de la porcelana, pero con una excelente resistencia ante los quiebres.
¿Qué son las Coronas de Zirconio?
La corona dental es un tratamiento estético y funcional de los dientes. Esta se asemeja a una “funda”, pero hecha de un material muy resistente, que se coloca sobre el diente deteriorado. La corona cubre el diente a partir de la línea de la encía, y a diferencia de otros tratamientos como las carillas dentales (que solo cubren la cara anterior del diente), la corona dental reviste el diente por completo. Esto le otorga a nuestra dentadura un aspecto nuevo y sano, y una nueva resistencia que no implica el desgaste de nuestros dientes naturales, ya que se encuentran protegidos debajo de la corona o “funda”.
Los materiales para hacer una corona dental son diversos, dependiendo de las necesidades del paciente, del consultorio y del presupuesto disponible para el tratamiento.
Entre los materiales encontramos el Zirconio, un recurso relativamente novedoso en el campo de la estética dental, pero prometedor gracias a su apariencia y sus propiedades.
Composición y Fabricación de las Coronas de Zirconio
El zirconio, un elemento con propiedades metálicas y cerámicas únicas, es utilizado en diversos campos, destacándose en odontología por su versatilidad y biocompatibilidad. El zirconio, a pesar de tener similitudes con el titanio, se distingue en odontología por su estética superior y propiedades únicas, lo que lo hace ideal para coronas dentales
La razón de la llegada del Zirconio al sector odontológico, se debe al avance tecnológico, específicamente de las máquinas fresadoras con tecnología CAD/CAM. El Zirconio se distribuye en las clínicas odontológicas en forma de pequeños cubos, ya listos y condicionados para ser utilizados por estas máquinas, que poseen un alto nivel de precisión para el tallado de estructuras dentales.
Gracias a esto, las coronas de Zirconio se entregan mucho más rápido que las coronas de otros materiales, ya que su preparación es mucho más rápida y no se tarda más de tres consultas.
Propiedades físicas del Zirconio.
El zirconio se destaca por su resistencia excepcional a las fuerzas masticatorias y desgaste, lo que lo hace especialmente adecuado para coronas en premolares y molares, donde la durabilidad es crítica. Sin embargo, ante dietas muy específicas, su resistencia puede ser menor que la de otros materiales. El Zirconio es resistente ante la corrosión, la fricción y la rotura, y tiene una larga vida útil bajo los cuidados adecuados.
Estética y Zirconio.
El zirconio destaca por su translucidez y tonalidad natural, similar a la de los dientes, lo que lo hace ideal para tratamientos estéticos donde la apariencia es crucial . Asimismo, tienden a no mancharse o decolorarse, conservando permanentemente el color del diente, incluso aunque se produzca un desgaste del material.
Biocompatibilidad del Zirconio.
Su biocompatibilidad lo convierte en una opción segura, ya que el zirconio no provoca reacciones alérgicas ni afecta negativamente a los tejidos circundantes.
Ventajas de las coronas de Zirconio
Comparado con materiales como la porcelana o el metal, el zirconio combina resistencia y estética. Su coloración natural y translucidez imitan fielmente la apariencia de los dientes naturales, mientras que su robustez es ideal para soportar la masticación diaria.
Además, las coronas de zirconio ofrecen una solución altamente personalizable. Desde la selección de tonos hasta la adaptación precisa al tamaño y forma de cada diente, estas coronas se pueden ajustar a las necesidades estéticas y funcionales específicas de cada paciente, superando a menudo las opciones tradicionales en términos de adaptación y comodidad.
Proceso de fabricación de una corona de Zirconio.
Realizar una corona dental es un proceso que puede concretarse en hasta tres días. Es realmente muy rápido, y consta de unos pocos pasos:
Evaluación clínica.
Antes de cualquier tratamiento dental, se deben hacer los exámenes y limpiezas correspondientes. El paciente debe remover todas sus caries y hacerse una radiografía dental para que el dentista observe y evalúe el estado total de su dentadura.
Hay que tener en cuenta que muchas personas pueden no estar calificadas para realizarse coronas dentales, esto debido a diversas razones, como falta de estructura dental (recordemos que las coronas no suplantan los dientes, sino que los recubren) para colocar las coronas, enfermedades sistémicas o infecciones activas y problemas generales de higiene y salud dental, como la presencia de periodontitis.
Impresión dental.
El dentista utiliza pastas de silicona o alginato para tomar la impresión de la dentadura completa del paciente en ellas. Basándose en esta impresión, se fabrican las coronas o fundas, en las medidas adecuadas para cada diente. También se pueden utilizar otros métodos de registro dental, menos incómodos y más novedosos, como el escáner intraoral.
Envío al laboratorio para diseño digital y fresado.
Se envían los recursos necesarios al laboratorio, principalmente, la impresión dental. A partir de esta se realizará un modelo 3D virtual de la dentadura del paciente y posteriormente de las coronas dentales.
Luego, estas coronas se tallarán, por medio de un proceso de fresado con tecnología CAD/CAM sobre un bloque de Zirconio. El proceso de fresado está monitoreado por un ordenador, que gestiona las fresas o brocas de la máquina de tallado, para que perforen el material según el diseño creado por el técnico en CAD/CAM.
Últimos arreglos.
Finalmente, los últimos arreglos implican que se examine el acabado de la máquina de fresado y se pulan las mínimas imperfecciones de las coronas. Estos últimos detalles garantizan el encaje ideal de las coronas sobre los dientes, de modo que el paciente no vaya a presentar inconvenientes ni incomodidades.
Colocación de coronas.
En esta etapa final, se aplican las coronas a la dentadura del paciente por medio de un proceso de cementación. La cementación es permanente, lo que significa que las coronas no se pueden remover manualmente por el paciente, solo por el dentista utilizando removedores especiales. Los materiales de cementación suelen ser ionómeros de vidrio, resina u óxido de zinc.
Características de las Coronas de Zirconio.
Adherencia a la placa dental.
Las coronas de Zirconio tienen una superficie bastante lisa, a diferencia de la textura rugosa natural de los dientes naturales. Esto nos ayuda durante nuestra higiene dental, facilitando la remoción de restos de comida que gracias al Zirconio carecen de una superficie a la cual adherirse, evitando así la aparición de manchas, caries o enfermedades periodontales.
Ausencia de metal.
Las coronas de Zirconio, a diferencia de las de porcelana, no poseen estructuras metálicas internas, sino que son completamente traslúcidas.
Esto es favorable cuando tenemos una buena estructura dental, ya que las tonalidades del diente natural y las del zirconio se entremezclan para lograr una apariencia natural y fresca.
Gracias a la ausencia de metal, las encías retraídas no suponen un problema en la estética, puesto que no hay partes metálicas que contrasten con el color del diente natural, y en caso de una retracción de encías (luego de colocar la corona) no se evidenciará que llevamos una prótesis.
Asimismo, es favorable en casos de alergias, sensibilidad o una capacidad de cicatrización deficiente.
Estética.
La apariencia blanquecina traslúcida del Zirconio es popular por ser estéticamente atractivo para las personas. Además, se ha evidenciado que el uso de coronas dentales con metal, puede acabar oscureciendo la zona de las encías en algunos casos particulares. Para no exponerse a ese riesgo, los pacientes optan por una corona de Zirconio, que carece de metal y conserva siempre su tono, aportando a la belleza de su sonrisa.
Las coronas de Zirconio tienen la opción de personalizar su traslucidez, aumentándola o disminuyéndola según los deseos del paciente.
Tipos de Coronas de Zirconio según necesidad.
Coronas de Zirconio Monolíticas | Coronas «Prácticas»
Se denominan monolíticas a aquellas coronas que son completamente hechas de Zirconio. No están aleadas con metal, ni combinadas con otros materiales como litio o porcelana. Se utilizan en casos de alergias y de malos hábitos como bruxismo, ya que suelen ser más resistentes debido a la estructura molecular integra del Zirconio cuando no ha sido combinado con otros materiales.
Coronas de Zirconio Estratificado | Coronas cosméticas
Las coronas estratificadas tienen porcelana que reviste toda la superficie de la prótesis. La combinación de Zirconio con porcelana agrada más a algunos pacientes, que afirman causa una apariencia realista.
Coronas de Zirconio Translúcido.
Las coronas translúcidas han sido modificadas para lucir un aspecto más transparentoso, ya que esta característica, junto con la tonalidad de la corona, se pueden modificar y aumentar antes de fabricarlas. Son una opción favorable para los clientes que buscan una restauración de su dentadura con mayor estética que las coronas habituales.
Tipos de Coronas de Zirconio según su Ubicación y Función
Coronas para Dientes Anteriores.
Los dientes anteriores son los caninos y los incisivos: los dientes más visibles de una dentadura. Cuando elegimos colocarnos coronas de Zirconio en esta sección de dientes específicamente, tenemos que intentar sacarle el mayor provecho estético posible, ya que estos dientes no suelen utilizar mucha fuerza oclusiva, por lo tanto, no aprovechan totalmente la resistencia y dureza del Zirconio, pero sí pueden aprovechar su vistosidad. Elegir una alta transparencia para el zirconio o bien un zirconio estratificado con porcelana es recomendable y 100% seguro en coronas para dientes anteriores.
Coronas para Dientes Posteriores.
Los dientes posteriores son los encargados de aplicar la mayor cantidad de fuerza oclusiva mandibular. Al seleccionar coronas de Zirconio para los molares y premolares, debe ser con un sentido más práctico que estético, ya que estos dientes son poco visibles pero muy activos al ingerir alimentos. El Zirconio monolítico es una buena elección en estos casos.
Casos de Uso de las Coronas de Zirconio.
Restauraciones y las Coronas de Zirconio
Para las restauraciones dentales completas, el Zirconio, aunque es un buen material, puede no ser el más indicado, porque es ligeramente frágil en comparación a la cerámica con metal. Las coronas de zirconio pueden seleccionarse para dientes anteriores, pero en los posteriores, debemos tener en cuenta el tipo de comida que solemos ingerir, porque mientras más crujiente y dura sea, más rápido se desgastaran las coronas posteriores de Zirconio. Si, en cambio, solemos ingerir alimentos blandos, suaves o líquidos, las coronas de Zirconio serán completamente seguras para una restauración completa de toda nuestra dentadura.
Cosmética dental
En situaciones de carácter puramente cosmético, donde nuestro principal objetivo es mejorar nuestra apariencia (teniendo en segundo plano la funcionalidad) entonces las coronas de Zirconio son un sí total. Como ya se ha descrito antes, estas son, actualmente, la mejor opción del mercado en cuanto a belleza y esteticidad.
Cuidado y Mantenimiento de las Coronas de Zirconio.
Rutina de Higiene.
La rutina de higiene depende de cuáles dientes poseen coronas de Zirconio y cuáles no. En general, este material posee la ventaja de no ser muy adherente, por lo que no se ensuciará fácilmente; sin embargo, es bien sabido que cuando tenemos cualquier tipo de prótesis permanente en nuestros dientes, lo mejor que podemos hacer es ser puntuales con nuestra higiene bucodental.
Cepillar sus dientes.
Es recomendable cepillar los dientes al menos dos veces al día, preferiblemente una hora después de cada comida, para mantener las coronas de zirconio y los dientes naturales en óptimas condiciones.
Utilizar hilo dental.
Complemente esta limpieza con el uso de hilos o arcos dentales, que remuevan los restos de comida que el cepillo no puede.
Utilizar enjuague dental.
Aplicar enjuagues dentales también es un excelente complemento para eliminar eficazmente todos los microbios de nuestra boca.
Visitas al Dentista.
La frecuencia recomendada para revisiones y mantenimiento profesional le será indicada por el dentista después de aplicarle sus coronas, de manera que puedan mantener el contacto necesario para observar el proceso de adaptación de la mandíbula a las coronas y atender cualquier irregularidad.
Precio de las Coronas de Zirconio.
Rango de Precios.
Las coronas de Zirconio son actualmente las más solicitadas por los pacientes, gracias a su rápida entrega, a su estética, su durabilidad y la cantidad de detalle que posee, volviéndola casi indistinguible de un diente natural sano. Debido a esto, requiere de mayor inversión en salud bucodental, debido a la tecnología avanzada que utiliza para ser hecha con tanta premura y meticulosidad.
En cuanto al precio de las coronas de Zirconio existir un rango muy variable. Estos precios van a cambiar dependiendo de la clínica, experiencia del dentista, del laboratorio y de la dentadura del paciente. Estos costes se aplican específicamente a coronas que se vayan a colocar en dientes naturales. Cuando la corona de Zirconio desea colocarse en un implante dental, el precio puede ser algo mayor.
Tomando la Decisión.
Consulta y Planificación.
Es importante que notifique a su dentista de confianza, todas sus dudas e inquietudes al respecto de las coronas, ya que es la persona más indicada para proporcionarle información específica según su caso.
El dentista debe conocer los detalles de su rutina de cuidado dental, de su dieta, de cualquier enfermedad previa que haya padecido o padezca actualmente; debe conocer su objetivo con la colocación de las coronas y si su enfoque es práctico o cosmético.
